La concentración de las grandes empresas de distribución en España es uno de los factores que genera precios más elevados en los alimentos, según revela un estudio de la Fundación de Cajas de Ahorros Confederadas (Funcas). El informe denuncia que en las ciudades donde el mercado se concentra en unas pocas empresas distribuidoras, "se observan índices de precios más altos".

Según estos datos, hay cuatro provincias donde el grupo líder "ostenta más del 40% de la superficie comercial" total. Este es el caso de Eroski --que sobrepasa este porcentaje en Alava (44,7%), Guipúzcoa (40,7%) y Vizcaya (40,1%)-- y de Cash Lepe, que hace lo propio en Huelva (40,1%).

Desde otro punto de vista, Carrefour es la empresa que ejerce el liderazgo en más provincias españolas, con una media del 22,29% de los metros cuadrados comerciales de toda España.

En las conclusiones se afirma que el tamaño permite levantar "barreras de entrada" a los competidores que favorecen a las empresas ya instaladas, lo que "permite obtener precios más altos de los consumidores". Y subraya que la distribución ha incrementando su margen neto de beneficio en la venta de los productos.

Esta denuncia coincide con las formuladas en los últimos meses por las organizaciones agrarias, que han causado la apertura de una investigación sobre las causas del encarecimiento de los alimentos frescos por parte del Servicio de Defensa de la Competencia, dependiente de Economía.