La duodécima subida consecutiva del euríbor, registrada en septiembre, ha provocado que el indicador más utilizado para fijar el tipo de interés de los préstamos hipotecarios experimente su mayor incremento interanual de los últimos seis años hasta alcanzar el 3,715%, lo que supone un ascenso de 1,496 puntos porcentuales en el último año. Tan solo entre mayo de 1999 y mayo del 2000, cuando varió desde el 2,682% al 4,848%, se produjo una aceleración más brusca.

Con el nivel marcado ayer por el euríbor --que confecciona la Federación Europea de Banca con la media mensual del tipo con la que los bancos de la zona euro se prestan el dinero a un año--, este índice ha avanzado de forma clara en comparación con el 3,615% de agosto. Con todo, el indicador ha registrado una desaceleración en los últimos días del mes.

En estos momentos, los titulares de una hipoteca de 120.000 euros y con un plazo de 20 años que tengan que revisar el tipo de interés en los próximos días verán encarecerse su cuota mensual en 89,7 euros, lo que en el conjunto del año representa una subida de casi 1.076,4 euros.

EXPECTATIVAS Una gran mayoría de los "hipotecados" ya han revisado su cuota anual desde que empezaron las subidas, hace ya un año, por lo que los verdaderos efectos de las mismas se están trasladando al bolsillo de la mayoría de los ciudadanos.

Para el experto de Analistas Financieros Internacionales (AFI) David Cano, el indicador ya ha terminado una primera fase de subidas y el índice se está "aclimatando" a un escenario de tipos de interés entre el 3,25 y el 3,50%. El euríbor a un año refleja las previsiones del mercado sobre la situación de los tipos en la zona euro dentro de 12 meses. Así, cuanto más se manifiesta la expectativa de subidas en los intereses oficiales a uno y otro lado del Atlántico, más se incrementa el indicador.

La Federación de Consumidores en Acción (Facua) pidió ayer al Gobierno que elabore una ley que proteja a los usuarios ante situaciones de insolvencia, dado el último incremento del euríbor, el "desproporcionado incremento" en el precio de la vivienda y el "elevado" nivel de endeudamiento de las familias. La Federación opina que la Administración "debe tener en cuenta la corresponsabilidad del sector bancario y financiero en el endeudamiento de las familias".