El euríbor, el indicador más utilizado en España para el cálculo de las cuotas hipotecarias, también se ha tomado un pequeño respiro en vacaciones. La cotización diaria del índice registró ayer su tercer descenso consecutivo, hasta el 5,306%, y romperá en agosto una racha de cinco meses de subidas consecutivas. Pero los españoles continúan endeudándose: el número de familias que destinan más del 40% de sus ingresos mensuales a pagos financieros creció en los primeros cuatro meses del año hasta el 63%, frente al 47% de diciembre del 2007.

A punto de finalizar el mes y tras el nuevo retroceso de ayer, el indicador hipotecario se aproxima a una tasa intradía por debajo del 5,3%, cotización que está superando diariamente desde el 6 de junio. Después de marcar en julio el máximo histórico mensual, del 5,393%, el euríbor cerrará agosto con un promedio mensual del 5,32% (siete centésimas menos).

Los expertos aseguran que el cambio de tendencia es consecuencia de la moderación del precio del petróleo y la consecuente relajación de las presiones inflacionistas. Además, creen que la caída en agosto podría ser un indicador de la tendencia hasta diciembre, pero recuerdan que las tensiones continúan en el mercado crediticio, por lo que no descartan del todo nuevos repuntes.

Mientras el euríbor comienza a relajarse, otros datos no son tan esperanzadores. La Agencia Negociadora de Productos Bancarios aseguró ayer que el número de familias que destinan más del 40% de sus ingresos mensuales a pagos financieros creció en los primeros cuatro meses del año hasta el 63%, frente al 47% de diciembre del 2007.

La agencia agregó que los primeros días de septiembre "serán de verdadero impacto para miles de familias, ya que a los gastos de las vacaciones y de la vuelta al colegio se sumará una subida en la cuota de la hipoteca en un promedio de 500 euros al año".