Los expertos coinciden en que una cotización del euro por encima de 1,25 dólares perjudicaría a la economía española. Sobre todo a las exportaciones, que en su mayor parte dependen de la capacidad de compra de los socios europeos. España dirige el 70% de sus ventas exteriores a la Unión Europea (UE), mientras que el 30% tienen como destino áreas en las que las transacciones se realizan en dólares, como Asia y Suramérica.

Pese a que Alemania e Italia son los países de la Unión Europea (UE) que más perjudicados se ven por su exposición comercial al área del dólar, las exportaciones intracomunitarias también se ven sometidas a la presión de una divisa fuerte.

EFECTO COMERCIAL

Los últimos datos del Ministerio de Economía, referidos a febrero, reflejan un aumento del 12,7% de las importaciones, frente a un aumento del 3,5% de las exportaciones, lo que provocó un incremento del déficit comercial del 20,4%. Y puede ser peor, en la medida en que la cotización de la divisa europea se mantenga al alza como en las últimas semanas. "Si es así, perderemos competitividad", afirma Rosa Dulce, economista del Deutsche Bank.

El problema no será sólo mantener las ventas exteriores en el área del dólar, sino también las que se dirigen a la misma zona euro. Cuanto mayor es la diferencial de cotización a favor del euro, más barato resulta para los países comunitarios importar productos de Asia, Suramérica y EEUU. Si se tiene en cuenta que el 55% del comercio intraeuropeo es industrial, las transacciones pueden verse seriamente dañadas por el tipo de cambio, al tener mayor volumen de precios.

LARGO PLAZO

Para algunos expertos la situación no es pasajera. César Molinas, responsable de estrategia de renta fija para Europa de Merrill Lynch, opina que los movimientos del dólar a la baja o al alza suelen prolongarse. La sociedad de bolsa considera que el euro se mantendrá por encima de los 1,30 dólares, entre otras razones porque el crecimiento económico en Europa se ve disminuido. Agrega que la terquedad del Banco Central Europeo (BCE) en mantener los tipos de interés no ayuda a una rápida recuperación.

La diferencia entre EEUU y Europa en cuanto a expectativas impulsa a algunos analistas a pensar que la situación de cambio de las monedas no es real. "El dólar debería estar mucho más alto y el euro más bajo, puesto que la economía norteamericana va mejor que la de la zona euro", afirma José Luis Martínez, director de análisis de Citibank.