El Parlamento Europeo aprobó ayer una propuesta de marco presupuestario de la Unión Europea (UE) para el periodo 2007-2013, que implica un techo de gasto un 12% más alto que la propuesta de compromiso de la presidencia luxemburguesa y es potencialmente más favorable a España. A una semana del crucial Consejo Europeo, que debe aprobar el marco financiero de la UE ampliada, la Eurocámara recordó su poder de veto y advirtió a través de su presidente, Josep Borrell, a los líderes de los Veinticinco que "no aceptará un presupuesto que se aleje demasiado" de su propia propuesta.

El proyecto de marco presupuestario de la Eurocámara fue respaldado por una amplísima mayoría de 426 votos a favor, 140 en contra y 122 abstenciones. Las delegaciones españolas de los grupos socialista y popular, pese a valorar positivamente la propuesta, se abstuvieron, por no estar incluida la enmienda que pedía una "solución política" para los países, como España, que pueden sufrir una drástica reducción de las ayudas tras la ampliación y por estimar que el proyecto de la Eurocámara deja una puerta abierta a una hipotética cofinanciación nacional en la política agraria.

El proyecto de la Eurocámara fija un techo máximo de gasto de 974.837 millones de euros para el periodo 2007-2013, lo que equivale al 1,18% de la renta de la UE. Esta cifra es un 12% superior a los 871.000 millones de la propuesta de la presidencia luxemburguesa de la UE, que los ministros de los Veinticinco debatirán en un cónclave especial el próximo domingo.

Los eurodiputados Enrique Barón (PSOE) y Gerardo Galeote (PP) destacaron que la propuesta de la Eurocámara mantiene una dotación generosa para las ayudas regionales y de cohesión, unos 33.000 millones de euros superior a la planteada por la presidencia luxemburguesa en el conjunto del periodo, lo que permitiría a España conservar un mejor nivel de ayudas.