El Eurogrupo elegirá hoy al ministro holandés de Finanzas, Jeroen Dijsselbloem, como presidente del Eurogrupo en sustitución del luxemburgués Jean-Claude Juncker, que abandona el cargo tras ocho años de mandato a petición propia, según han explicado fuentes europeas.
España y Francia son los países que más reservas tienen sobre este nombramiento y exigen que el aspirante exponga antes su programa. Holanda es uno de los países con una línea más dura a favor de la austeridad, de resistencia a la unión bancaria y en contra de cualquier forma de mutualización de la deuda.
"Queremos saber cuál es exactamente la postura del candidato holandés en los diferentes puntos de la agenda que vamos a discutir los próximos meses, en la que hay temas muy importantes para España", han explicado fuentes del ministerio de Economía. "Sólo entonces decidiremos", añaden.
El Gobierno de Mariano Rajoy considera además que, tras perder su puesto en el Banco Central Europeo (BCE), España no tiene la representación que le corresponde por su peso económico en los altos cargos de las instituciones europeas.
El ministro de Finanzas holandés anunció oficialmente el jueves su candidatura a presidir el Eurogrupo y es el único aspirante al cargo. La elección se realizará por mayoría aunque los ministros de Economía de la eurozona aspiran tradicionalmente al consenso.
El nombre de Dijsselbloem se acordó informalmente durante la cumbre de líderes europeos del 20 y 21 de diciembre. Desde entonces, el ministro de Finanzas holandés ha realizado una gira de capitales con el fin de presentar su candidatura que le ha llevado a Bruselas, París, Roma y Madrid, donde se reunió el jueves con el ministro de Economía, Luis de Guindos.
La última etapa de su gira ha sido el viernes en Luxemburgo, donde ha preparado con Juncker el traspaso de poderes.
El presidente del Eurogrupo dirige las reuniones de ministros de Economía de la eurozona y es responsable de buscar consensos entre los ministros. Con la crisis del euro, el Eurogrupo ha cobrado una gran importancia ya que en él se han acordado decisiones como los rescates de Grecia, Portugal e Irlanda, el programa bancario para España o la creación del mecanismo europeo de estabilidad.
Dijsselbloem, de 46 años, ocupa la cartera de Finanzas en Holanda sólo desde noviembre como parte de la nueva coalición entre democristianos y socialistas que sustenta el Gobierno de Mark Rutte.
Su candidatura conviene a Alemania, ya que representa a un país con calificación crediticia 'triple A' que tradicionalmente se ha aliado con los postulados de Berlín.
Al mismo tiempo, Dijsselbloem representa al Partido Laborista holandés en el Gobierno de coalición, lo que puede hacerlo más aceptable para el presidente socialista francés, François Hollande.
