Pese a los manos augurios que pronosticaban una desaceleración, la economía de la Eurozona aguanta el tipo. Entre julio y septiembre, según los datos preliminares avanzados este jueves por la oficina europea de estadística (Eurostat), el producto interior bruto (PIB) de los países del euro creció un modesto 0,2%, la misma tasa que durante el trimestre anterior. Además, en el conjunto de la Unión Europea el dato fue ligeramente superior con un repunte del PIB del 0,3%, una décima más que el datos registrado entre mayo y julio.

En cuanto a la comparativa interanual, el ejercicio arroja un crecimiento del 1,1% en la eurozona, una décima menos que en el trimestre precedente, y del 1,4% en el conjunto de la UE, la misma tasa interanual que durante el trimestre anterior. Esta evaluación preliminar confirma que la economía se mantiene estable y que las estimaciones que auguraban un rebote de solo el 0,1% no se han producido.

La agencia de estadística también ha confirmado una ligera caída de la inflación interanual de la zona euro, al 0,7% en octubre, debido a la caída de los precios de la energía, un limitado encarecimiento de los precios de los bienes industriales no energéticos y un avance de los precios de los alimentos, alcohol y tabaco similar a la del mes anterior. Mientras tanto, excluidos los precios de la energía, la inflación se situó en el 1,2% el octubre, una décima más que en septiembre.

SEGUNDA MAYOR TASA DE PARO

Respecto a la última comparativa de desempleo presentada también este jueves por Eurostat, la agencia confirma que España sigue siendo el segundo país de la UE con la mayor tasa de parados, del 14,2%, solo por delante del 16,9% de Grecia (correspondiente a agosto). La cifra española, aunque es una décima inferior a la registrada en el mes agosto, sigue siendo muy superior a la de la eurozona (7,5%), duplica la del conjunto de la UE (6,3%) y multiplica por cuatro la registrada por países como Alemania, Holanda o Austria.

La comparativa también coloca a España a la cola de Europa en cuanto a desempleo juvenil con una tasa del 32,8%, el doble que la registrada en la Eurozona (15,9%) y la UE (14,5%). Solo Grecia registrada en julio- un dato peor con una tasa del 33,2%. En ambos casos a años luz de la realidad que viven países como República checa (4,4%), Alemania (5,9%) y Holanda (7,2%). En términos globales, según Eurostat, en septiembre había 3,2 millones de menores de 25 años en paro en toda la UE de los cuáles 2,2 millones estaban en la zona euro.