La quinta generación de telefonía móvil parece a veces más una promesa que una realidad tangible. El presidente y consejero delegado del fabricante LG Electronics Iberia, Jaime de Jaraíz, asegura que en 2020 explotará a nivel mundial. «Habrá más oferta para el consumidor, más opciones y más posibilidades», explicó ante los medios de comunicación en el 33 Encuentro de Economía Digital y Telecomunicaciones, organizado por la patronal Ametic.

Sin dilucidar si los aparatos en sí serán más baratos (ahora los pocos teléfonos de tecnología 5G en España son de gama alta, incluido el V5 ThinQ 5G de LG), Jaraíz se mostró convencido de que todos los operadores españoles lanzarán esta tecnología en 2020 «aunque sea con estándar Non Stand Alone». De momento, en España solo se puede acceder a estas redes de la mano de Vodafone y con dispositivos de Xiaomi, Samsung y LG.

La marca que dirige Antonio Coimbra se realiza sobre infraestructura de 4G (lo que se conoce como estándar Non Stand Alone). El estándar Non Stand Alone (NSA) se despliega sobre la red existente de 4G y, por tanto, tiene sus limitaciones. Es decir, se notará en un aumento de la velocidad de descarga, pero no incluye dos de las principales funcionalidades del 5G: la gigantesca reducción de latencia y la posibilidad de realizar conexiones masivas de dispositivos. Para ello habrá que esperar al denominado Stand Alone (SA) que incorpora un core (nodo central de la red) de 5G puro, pero que todavía tardará un año en desplegarse.

El director del Observatorio Nacional del 5G, Federico Ruiz, recuerda que algo similar sucedió con el 4G. «La estandarización está terminada pero no todo está desplegado en 4G, hay muchos servicios que no; invocar la razón de que no está terminado el estándar de 5G no es una buena razón para no utilizarlo», aseguró. El 2020 será el año «para el que vende móviles porque habrá más infraestructura», pero «para el usuario quizás no lo sea hasta el 2021».