Extremadura creció un 1,86% el año pasado, por debajo de la media nacional, que fue del 2,19%, mientras que el nivel de renta de sus habitantes no llega al 75% de la media comunitaria.

Respecto a la renta familiar disponible, su valor medio en España alcanza los 12.324,5 euros anuales (2.053.000 pesetas), moviéndose las CCAA en una horquilla entre el índice más alto que tiene Madrid (126,96) y el más bajo a Extremadura (70,69), datos que indican que la producción madrileña por habitante en el 2002 superó en el 70,6% a la extremeña en el 2002 frente al 66,67% de 1995.

En cuanto a la renta regional bruta, Extremadura vuelve a estar en la cola con 69,36% con respecto a la media, aunque hay cierto crecimiento comparando el dato con el 95, en el que el índice fue de 65,04%. En cuando a demanda interior, está 81% con respecto al resto del país en el 95 y subió hasta el 88,64% en el 2002.

Además, en una relación ordenada de las 266 regiones de la UE, tras la ampliación, destaca, con datos referidos al 2000, que Extremadura está en el furgón de cola ocupando la posición 215. También se confirma que pese a la desaceleración, la tasa de crecimiento del VAB más intensa la experimenta el eje de centro, en el que se incluye la región, con un 2,3%.

Desde un punto de vista sociológico, los extremeños son de los que valaron de forma más negativa su calidad de vida.