El consejero de Economía y Trabajo de la Junta de Extremadura, Manuel Amigo, inauguró ayer en Pekín una oficina comercial que se suma a las que ya existen en Paris, Londres, Lisboa, Bruselas, Dusseldorf y Nueva York para ayudar a las empresas en el exterior. "Extremadura cuenta con una gran vocación exportadora no solamente en el sector agroalimentario y aunque las cifras sean modestas, aunque se multiplicaron por diez en la última década, la apertura de la oficina orientará a los empresarios", manifestó el consejero.

Según afirmó con un volumen de exportaciones extremeñas que representa un 6% de las españolas, Extremadura quiere avanzar en su penetración en el mercado chino, al que no es la primera vez que acude. "China debe estar en la agenda de todo empresario, pero la relación comercial es cada vez más compleja y es necesario adaptarse a la nueva relación entre cliente, socio y base productiva", manifestó el jefe de la Oficina Comercial de la Embajada de España en China, Luis Cacho.

Según Arturo Lanz, delegado de la Compañía Española de Financiación del Desarrollo, "es muy importante prepararse para abordar un mercado difícil", informa Efe.