El Ibex 35 logró ayer, por fin, recuperar el nivel de los 14.000 enteros perdidos hace cuatro meses. Atrás quedaron las indecisiones de los últimos días y el índice reaccionó hasta ganar el 1,9% animado por los buenos resultados trimestrales de la banca, que alejan los miedos a que las entidades españolas estuvieran contaminadas por los créditos basura o no estuvieran preparadas para hacer frente a la falta de liquidez en los mercados.

En el ánimo de la bolsa también influyó ayer la decisión conjunta del Banco Central Europeo, de la Reserva Federal estadounidense y del Banco de Suiza de aportar dinero al mercado para atajar la crisis crediticia. Los principales mercados europeos respondieron bien a la noticia y cerraron en positivo.

En España, las acciones del Santader y de Telefónica fueron las protagonistas de la jornada al avanzar el 3,91% y el 3,28%, respectivamente. Acapararon el interés de los inversores después de que la agencia Standard & Poor´s mejorara el rating de Brasil, donde ambas compañías tienen intereses y han anunciado que van a impulsar sus actividades. De hecho, de los algo más de 7.000 millones de euros que se movieron ayer, 1.200 correspondieron al Santander y 850, a Telefónica.

Sin embargo, fue Bolsa y Mercados Españoles (BME) la que experimentó la mayor subida del Ibex 35, con un repunte del 5,04% después de anunciar que había incrementado su beneficio un 10% hasta marzo.

Durante esta semana, BME ha ganado un 6,12%, mientras que el BBVA logró revalorizarse el 4,79%. Pero Telecinco, Acerinox y Santander también subieron por encima del 4% y todos los valores bancarios terminaron en positivo.

Fue Sacyr Vallehermoso la que lideró las pérdidas semanales (2,89% de caída) al conocerse que su filial Itínere iba a aplazar su salida a bolsa. Las empresas energéticas tampoco han gozado del beneplácito de los inversores, que están a la espera de la reorganización del sector.