La economía española creció en el 2006 por encima de la media europea y continuará creciendo en el 2007 (el 3,6%) y en el 2008 (a un ritmo menor del 3,4%), pero es clave que el Gobierno español acelere las reformas estructurales para mejorar la productividad y la competitividad. Este es el mensaje del informe semestral del Fondo Monetario Internacional (FMI) Perspectivas Económicas Mundiales , que ayer se presentó en Washington y que prevé que en los dos próximos años la economía mundial moderará su crecimiento, pero que este será más sólido y sostenido. Según el FMI, este año el crecimiento de la zona euro será superior al de EEUU por primera vez desde el 2001.

El estudio del FMI prevé que la economía española crecerá un 3,6% en el 2007 y un 3,4% en el 2008, una décima por encima de la previsión que el propio FMI hizo pública el pasado marzo. En el 2006, España creció un 3,6%.

Por otra parte, la economía mundial se desacelerará los dos próximos años respecto el 2006 (un 4,9% frente a un 5,4%).