Aunque los instrumentos escogidos por cada banco o caja son diversos, el grueso de las entidades aplican ya mecanismos de limitación de tipos. La Caixa, por ejemplo, ha optado por el seguro. Aplica el denominado collar que prevé un tope máximo del 6%, y otro mínimo entre el 2,5% y el 3%. Banesto, como el resto del grupo SCH, prefiere establecer un techo en el 5%, aunque, según Francisco Javier Gamarra, responsable del negocio hipotecario, el banco se plantea aplicar límites por arriba y por abajo en los contratos. El banco ofrece un techo del 4% durante tres años, el 5% durante cinco años y el 6% durante ocho años.

El Banco Popular ha establecido un suelo del 3% en las hipotecas suscritas en internet y del 4% en oficinas. Víctor Pezuela, responsable del negocio en internet, destaca que no es momento para techos de tipos de interés, "ya que no es previsible que la economía europea crezca en los próximos dos años".