El Gobierno francés de Jean-Pierre Raffarin presentó ayer el proyecto de Presupuestos para el 2004, que prevé un déficit público del 3,6% del producto interior bruto (PIB). Este dato comportará la violación por tercer año consecutivo del pacto de estabilidad europeo, que sitúa el tope de los números rojos en el 3%.

En un intento de rebajar la tensión con las autoridades comunitarias, fuentes oficiales francesas destacaron que el 3,6% de déficit previsto refleja una voluntad de reducirlo, ya que en el 2003 se calcula que superará el 4%. Además, el proyecto de Presupuestos del 2004 fija también un calendario de reducción del déficit: 2,9% en el 2005; 2,2% en el 2006 y 1,5% en el 2007 --si la economía crece un 2,5% al año--. Con estos compromisos, el Ejecutivo intenta evitar las sanciones europeas a las que se expone por incumplir el pacto de estabilidad.

Raffarin ha insistido que éste es un presupuesto orientado a fomentar el crecimiento, con una congelación del gasto público y un recorte de la presión fiscal, cuyas medidas más contundentes son la reducción de un 3% del impuesto sobre la renta y la rebaja de las cargas sociales que pagan las empresas. El plan del 2004 prevé un crecimiento económico del 1,7%. Los aumentos de fondos para Interior, Justicia, Defensa, Educación e Investigación se subsanarán con recortes en otros ministerios, y se suprimirán casi 5.000 puestos de funcionarios.

Además de adoptar un tono mucho menos prepotente en la presentación de los presupuestos, el Ministerio de Economía y Finanzas atribuyó parte de los problemas actuales a la herencia de la gestión del Gobierno del socialista Lionel Jospin. Así, afirmó que la ley de las 35 horas costó a Francia un punto de crecimiento del PIB y añadió que los 50.000 empleos públicos creados en el periodo de mayor crecimiento están lastrando las cuentas.

MAS CONFIANZA EN ALEMANIA

Los empresarios alemanes se muestran cada vez más optimistas sobre las posibilidades de crecimiento de la economía de su país. Según el Instituto de Investigación Económica de Alemania (IFO), la confianza empresarial subió en septiembre hasta los 91,9 puntos, frente a los 90,8 puntos del pasado agosto, según el IFO. El dato es significativo, ya que se sitúa por encima de lo vaticinado por los expertos y al nivel más alto de los últimos 16 meses.