La situación de los supermercados DIA se complica. El fondo Letterone ha decidido ampliar el plazo para que los accionistas le vendan sus acciones del 23 al 30 de abril ante la escasa aceptación encontrada hasta este momento. Según apunta el vehículo inversor del magnate ruso en un hecho relevante a la CNMV, hasta este martes solo habían comunicado su decisión de vender sus acciones a 0,67 euros un 4,64% del capital.

El éxito de la opa pasa por que el fondo -propietario del 29% de DIA- adquiera el 35,5% del capital que no controla, algo que todavía parece lejos y con las vacaciones de por medio Letterone prefiere dar algo más de espacio a los accionistas. En el hecho relevante, el fondo justifica de esta forma la decisión de ampliar la fecha límite hasta el día 30: "Letterone ha tomado esta decisión para que los accionistas de DIA dispongan de más tiempo para tomar una decisión sobre la aceptación de la Oferta después de la Semana Santa, y así maximizar la aceptación de la oferta", asegura.

Si la opa no tiene éxito, el futuro de la cadena de supermercados se complica. En la última junta de accionistas se acordó una ampliación de capital de 500 millones de euros que está sujeta al éxito de esta opa y de no llevarse a cabo la compañía se enfrentaría a un preconcurso de acreedores en el mes de mayo, como antecendente del concurso.

PRESIÓN PARA LOS ACCIONISTAS

En un comunicado, el fondo de Fridman recuerda la situación límite que atraviesa la empresa en quiebra técnica y con un deterioro profundo del negocio -con una caída de las ventas del 4,3% en el semestre-, y que el Consejo de Administración de la compañía reconocía hace unos días la OPA como la mejor alternativa para todos los interesados. "La situación actual de DIA es muy complicada (...) Sin una inyección de capital y un cambio en el gobierno y en el liderazgo para lograr una exigente transformación, liderada por LetterOne, la viabilidad del negocio está en duda", expone el director de L1 Retail, filial de distribución de Letterone en la nota.

Letterone avanza en el comunicado que mantiene conversaciones con las entidades bancarias a quienes ha pedido una mayor flexibilidad. Eso incluye un aumento de 380 millones de euros "de una nueva línea de financiación super senior, comparada con los 170 millones de euros previstos anteriormente". Además, asegura que continúa negociando con los bancos acreedores para alcanzar un acuerdo que permita una estructura de capital viable a largo plazo.