Gadair, una pequeña aero- línea de origen mallorquín, ultima a contrarreloj la adquisición de Spanair a la sueca SAS. Los equipos jurídicos de los socios de ambas compañías y del banco de negocios UBS, que intermedia la operación, tenían anoche prácticamente concluido el contrato de venta.

Aunque el precio final rondará los 500 millones de euros, el desembolso real de Gadair para tomar el control de la segunda aerolínea española (transporta a 10 millones de pasajeros anuales) se limitará a unos 150 millones. A esa cifra hay que sumarle la deuda, de unos 350 millones. Gadair competía con más de una decena de candidaturas, como Marsans o Iberia.