Gas Natural acaba de firmar un acuerdo en EEUU para consolidarse en un país que abandona a pasos agigantados su condición de importador de gas para convertirse en exportador con una fuerte apuesta por gases no convencionales como el gas pizarra. El consejero delegado de Gas Natural, Rafael Villaseca, presentó en Nueva York el pacto firmado con Cheniere, firma con sede central en Houston (Texas), para colaborar en una planta de la compañía en Sabine Pass (Luisiana).

El acuerdo no es vinculante pero sienta las bases para negociar una reserva de capacidad en la terminal de entre 1,5 y 2 bcm anuales de los 9,5 bcm totales (cada bcm son mil millones de metros cúbicos). La operación se pondrá en marcha en el 2017.