El precio de venta al público de las gasolinas apenas recoge los descensos registrados por el barril de petróleo en las últimas semanas. Los carburantes cuestan prácticamente lo mismo que en noviembre, cuando el barril de petróleo estaba en torno a un 10% más caro, aunque se mantienen las fuertes diferencias entre provincias en España.

Fuentes del sector petrolero afirmaron que los precios se han reducido en los últimos días, pero desde el Gobierno no se considera suficiente. Es más, el Ministerio de Economía ha sondeado a petroleras sobre la cuestión, según fuentes del Ejecutivo. Cuando José Montilla era ministro de Industria ya propició una reunión con el sector para invitarles a ajustar más los precios a la cotización del crudo. Algunos analistas de la industria petrolera admiten que cuando la cotización del crudo baja, los precios de venta que aplican las petroleras no lo hacen en la misma proporción porque las compañías "aprovechan para aumentar márgenes y compensar el coste de las reservas obligatorias", que cubren 90 días de abastecimiento. Cuando el barril sube, "tampoco se repercute el alza en su totalidad en el precio final" porque las compañías ya ganan en el segmento de producción suficiente para compensar.