Ante la crisis, cinturón apretado. Menos ropa nueva, electrodomésticos que duran más, vacaciones más cortas... El gasto en alimentación es de los pocos que se mantiene e incluso crece respecto a hace un año, pero la tendencia es consumir menos fuera de casa y hacerlo más en el hogar: el gasto fuera de casa se ha reducido el 3,8% en solo un año.

Según datos del Ministerio de Medio Ambiente, de abril del 2008 a marzo del 2009 los españoles gastaron 95.680 millones en alimentación, el 0,9% más. Sin embargo, el gasto fuera del hogar cayó casi un 4% y las visitas a establecimientos, el 3,9%; mientras que dentro del hogar el consumo creció el 3,1%. Es decir, menos comidas y cafés fuera de casa y vuelta al consumo en el hogar.

Cada ciudadano consume algún producto fuera de casa 3,3 veces por semana, y el gasto por ocasión se mantiene en 4,33 euros. Sin embargo, son los establecimientos más visitados los que más han reducido su clientela: bares y tabernas (-6,1%) y restaurantes a la carta (-4,2%). Las cafeterías ha perdido el 2,2% de las visitas, y los restaurantes de menú, el 0,2%. Estas cuatro categorías acumulan dos de cada tres actos de compra de alimentación fuera del hogar.

MAS HELADOS En el resto de categorías, es destacable el descenso de visitas a las panaderías y pastelerías (-12,5%), las máquinas expendedoras (-8,2%), los quioscos y gasolineras (-7,8%) y la restauración nocturna (-9,5%). Solo aumentan visitas a las heladerías (+7,8%) y a los establecimientos de autoservicio (+1,9%).

El ciudadano, ahora, sale menos los fines de semana (-3,1% de visitas), aunque en porcentaje de gasto es a la inversa: entre semana rebaja ligeramente el gasto, aunque lo aumenta entre la noche del viernes y la del domingo (+2,7%). Por momento de consumo, la crisis ha provocado una disminución del gasto sobre todo en el tentempié nocturno (-16,9%), el de media mañana (-12,8%) y la merienda (-12,7%). También baja la inversión en desayuno y comidas (-3,5%), mientras que en cenas la caída es del 1,5%. Tanto esfuerzo merece una recompensa: el consumidor gasta el 7,5% más en el aperitivo.

El cambio de hábitos fuera y dentro del hogar queda reflejado en los productos que consumimos. Los de más precio y los alimentos asociados a meriendas y desayunos son los que más caen: vinos espumosos (-35,9%), infusiones (-29,8%), mariscos (-17,2%), chocolate (-12,4%), cordero (-11,5%), bollería (-10,8%), y cereales (-10,3%).