Los españoles se gastaron una media de 21.286 euros en comprar un coche en julio. Esa cantidad supone un incremento del 3,6% respecto al mismo mes del 2005 y del 19% en relación con el precio medio del 2001, que fue de 17.856 euros. El aumento del gasto se debe a la actualización anual de los precios por parte de las marcas y, sobre todo, a que los compradores prefieren modelos más grandes y mejor equipados.

Del 19% de aumento, alrededor de un 8% es atribuible a la inflación. El resto se debe a la opción del comprador por conducir coches de una gama superior. Dos ejemplos: la potencia de los automóviles vendidos creció un 2,3% y llegó a 116,9 caballos, mientras que el tamaño se incrementó un 0,3%.

Detrás de la subida del gasto medio también se encuentra el aumento de las matriculaciones de coches de lujo, que crecen a un ritmo del 46% anual y que tienen un efecto directo en la facturación global del sector, según Antonio Romero, presidente de la Federación de Concesionarios (Faconauto).

MARCAS ASIATICAS En el otro extremo, también aumentan las ventas de coches pequeños, con una importante presencia de marcas asiáticas de precio bajo. "Las marcas generalistas se encuentran atrapadas en un sándwich entre los dos extremos y sufren descensos de ventas", afirma Romero.

El retrato robot del coche más vendido en España es el de un modelo de gama media con un equipamiento que incluye frenos ABS, elevalunas eléctricos delanteros y cada vez más también los traseros, cierre centralizado, airbags delanteros, dirección asistida y radio. Los compradores suelen pedir opciones para mejorar la seguridad.

La puesta en marcha del sistema del carnet de conducir por puntos acelerará la tendencia del mercado hacia la "americanización", en la que los usuarios priorizan la comodidad y la seguridad a la potencia, según el responsable de la federación de concesionarios. Romero prevé un gran desarrollo de las ventas de automóviles equipados con control de velocidad, automáticos y con capacidad para siete plazas.

El predominio de la adquisición mediante créditos, que ronda el 90%, facilita que los vehículos se vendan con un equipamiento superior, según Josep Lluís Ayala, responsable de distribución de una de las 27 marcas del grupo Quadis, el de mayor tamaño en España. "Por unos pocos euros más de cuota mensual, los compradores obtienen muchas más prestaciones", asegura.

El coste de sistemas como el de estabilidad (ESP), el control de velocidad o los airbags adicionales queda amortiguado por préstamos que tienden a alargarse hasta los 10 años.

El precio medio de los vehículos vendidos en la red de Quadis oscila entre los 22.200 y los 23.000 euros, con una subida anual de los precios de las marcas del 2% al 4%. "Los coches no han subido tanto como el nivel de vida de los compradores", dice Ayala.