General Motors dijo hoy que suspenderá temporalmente sus contribuciones al fondo de pensiones de sus empleados para reducir sus costes y ante el empeoramiento de las dificultades económicas tanto en el sector del automóvil como globalmente.

A partir del 1 de noviembre, GM dejará de contribuir a los planes de pensiones de sus empleados, conocidos como 401(k), creados para que los trabajadores ahorren de cara a su jubilación con beneficios fiscales.

La medida será acompañada por la suspensión de otros pagos a programas de prestaciones que estaba realizando la compañía.

Hoy, el periódico "The Wall Street Journal" señaló en su edición electrónica que GM se podría ver forzado a despedir de forma forzada a trabajadores en vez de recurrir a bajas incentivadas y jubilaciones anticipadas, por el empeoramiento de su situación económica.

Diversos analistas del sector han dicho que GM está perdiendo unos 1.000 millones de dólares al mes y que a este ritmo no tiene suficiente liquidez para sobrevivir hasta finales del 2009.

General Motors ha perdido 18.800 millones de dólares en los seis primeros meses del año. En los dos últimos años, las pérdidas suman más de 57.000 millones de dólares.

También hoy, Chrysler anunció la eliminación de 1.825 empleados con el cierre de una planta de producción de todoterrenos y la eliminación de un turno de trabajo en otra factoría.

Según informaciones publicadas en los últimos días, Cerberus -propietario del 80,1 por ciento de Chrysler- está negociando con General Motors y Renault-Nissan la venta del tercer fabricante de automóviles estadounidense.