El Gobierno alemán estima ahora que el crecimiento del producto interior bruto (BIP) podría ascender hasta el 3% este año, tras el inesperado aumento del 2,2% registrado en el segundo trimestre del 2010. Este es el porcentaje que baraja como probable el Ministerio de Economía alemán, cuyo titular, Rainer Brüderle, se refirió el viernes a las nuevas cifras de crecimiento ofrecidas por la oficina estadística europea, Eurostat, como una recuperación económica "en formato XL en dirección XXL".

Los cálculos, de confirmarse, doblarían los pronósticos gubernamentales actuales para el crecimiento del PIB del presente año, estimados en el 1,5%, según explica el semanario Der Spiegel .

Las nuevas estimaciones oficiales del Gobierno se darán a conocer en octubre, pero Brüderle ya ha avanzado que podrían estar sobre el 2%.

Las razones de este optimismo se fundamentan en el hecho de que el impulso econó- mico no se sustenta únicamente en el auge de las exportaciones, tradicional motor de la economía alemana, sino también en el consumo privado y las inversiones empresariales. Pese a ello, las ventas de productos alemanes al exterior siguen siendo la mejor garantía para el crecimiento alemán y de toda la UE. Países como España, que en el segundo trimestre del año ha consolidado un crecimiento más bien moderado, el 0,2%, según datos del INE, debe parte de esa evolución al tirón de la industria alemana. El 60% de las exportaciones españolas se dirigen a la zona euro. Y de ese porcentaje, Alemania es el segundo cliente español, tras Francia.