El Gobierno autorizó ayer a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) a adquirir hasta el 5% de Enagás, la gestora del sistema gasístico español. Esta posibilidad ya estaba recogida en la ley de hidrocarburos de 1998, modificada este año, al considerar el Gobierno que la empresa era estratégica, como ocurre con Red Eléctrica, de la que la SEPI tiene el 20%. Al precio de ayer, el 5% valía 217 millones, aunque la compra no tiene que hacerse de una vez.

Según la referencia del Consejo de Ministros, el Ejecutivo ha aprobado la entrada del grupo público en el capital de la compañía gasística por "el interés general de las actividades que el legislador encomienda a Enagás". La ley del sector de hidrocarburos responsabiliza a Enagás de la gestión técnica de la red gasística y la convierte en garante de la continuidad y la seguridad del suministro.

Ninguno de los actuales accionistas de Enagás tiene más del 5%. Ni siquiera Gas Natural, que tenía en 1998 casi el 100%, tras comprárselo al Estado. A principios de esta década, la ley obligó a la gasística a vender su parte hasta quedarse con solo el 5%, después de calificar a Enagás como gestor del sistema. La ley limita los derechos políticos al 3% del capital y al 1% si el accionista lo es de otra energética, como BBK, que también tiene una parte de Iberdrola. Solo la SEPI carece de limitaciones.

CONCESION Enagás ha obtenido la concesión para explotar un almacenamiento subterráneo en Yela, Guadalajara. La compañía invertirá 400 millones de euros en las instalaciones, que se conectarán a la red de gasoductos e incrementarán en un 50% la capacidad de almacenaje subterráneo de España. La última de estas instalaciones que se puso en marcha fue la de Gaviota (Vizcaya), en 1993.