El secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, confía en que la moderación de los precios se mantenga en los próximos meses y que el año termine con un nivel de inflación “sensiblemente inferior” al actual. Ello, junto a la moderación de los salarios, permitirá que “recuperemos la competitividad”, ha dicho el número dos de Economía, al valorar los datos del índice de precios de consumo (IPC) conocidos hoy.

En enero los precios bajaron el 1,3% respecto de diciembre, el mayor descenso mensual desde hace 50 años, en junio de 1963, cuando la caída fue del 1,8%. La inflación interanual se ha situado en el 2,7%, dos décimas menos que el mes pasado, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), organismo que hace dos semanas adelantó provisionalmente una tasa interanual del 2,6% y un descenso mensual de los precios del 1,4%.

Efecto de las rebajas

El descenso de la inflación anual se debe a la moderación de los precios de los productos energéticos y de los bienes industriales no energéticos, especialmente el vestido y el calzado. En enero, mes estrella de las rebajas de temporada, vestido y calzado cayeron desde el 0,3% de diciembre hasta el -0,1%.

Los medicamentos también moderaron sus precios que se rebajaron en más de un punto su tasa interanual, hasta el 12,1%, por el abaratamiento de los medicamentos a causa de la suspensión del euro por receta en Cataluña.

Estas caídas han compensado la aceleración de los precios de la alimentación, especialmente de los productos frescos como la fruta, patatas y pescado. Por el contrario bajan la carne de ovino, las legumbres y las hortalizas.

Por el contrario, la alimentación elaborada creció el 3,6% en tasa anual, cinco décimas por encima de diciembre. La causa principal se encuentra en aumento del precio del tabaco del 9,7%.

Aunque la factura de la luz subió en enero, el fin del ajuste de precios de los peajes de acceso ha contribuido a que la electricidad se comporte de manera menos inflacionista en el primer mes del año.

El transporte recortó nueve décimas su tasa interanual, hasta el 2,2%, debido a que los precios de los carburantes aumentaron más en enero del 2012 que en el mismo mes de este año.

Por su parte, el índice de precios de consumo armonizado (IPCA) se situó en enero en el 2,8%, dos décimas menos, mientras la inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados, elevó una décima su tasa anual, hasta el 2,2%.

En Catalunya el IPC bajó un 1,2% en enero, mientras que la tasa interanual se situó en el 3,3%, tres décimas inferior a la registrada en diciembre. Catalunya es la segunda comunidad con una mayor tasa interanual, ya que por delante se sitúa Cantabria, con un 3,5%, y por detrás se encuentra Castilla y León, con un 2,9%.