Las ayudas al sector del automóvil se concretarán en forma de incentivos a la "investigación y la innovación", pero no a través de "ayudas directas", según avanzó ayer el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña. En esta orientación se mueven las ayudas a los nuevos coches eléctricos que plantea el Gobierno para retener a las multinacionales del automóvil.
Las ayudas al automóvil formarán parte del que será el sexto plan de medidas urgentes de impulso a la economía desde que, en abril, se constituyó el actual Ejecutivo socialista. El Gobierno trabaja en el plan y no se quiere mover ni un ápice de las reglas de juego que marca la Unión Europea. Ayer mismo, la comisaria de la Competencia, Neelie Kroes, afirmó que la industria automovilística europea no puede recibir el mismo trato que el sector financiero, por lo que instó a los estados a que no ofrezcan a los fabricantes de coches ayudas ilegales.
SOLICITUD DE 40.000 MILLONES La industria automovilística europea ha solicitado ayudas por importe de 40.000 millones de euros para hacer frente a la crisis que atraviesa el sector. Está previsto que la Comisión Europea anuncie el 26 de octubre un paquete de medidas de estímulo para este sector y para la economía en general. El presidente Rodríguez Zapatero anunció que un día después, en coordinación con Bruselas, España presentará un nuevo plan de medidas económicas.
Ocaña, explicó algunas de las líneas del plan. No se prevén nuevas rebajas fiscales. Este año ya se han puesto en marcha rebajas por 21.000 millones a familias y empresas y el Gobierno prefiere actuar por el lado del gasto, explicó Ocaña en un desayuno informativo organizado por Cinco Días . Según dijo, "hay margen" para adoptar nuevas medidas, aunque el déficit supere el 3% del PIB en el 2009. Para "mitigar en lo posible" el paro, el Gobierno planea "nuevas medidas para fomentar el empleo". Ocaña habló de medidas "coyunturales" --entre ellas, un nuevo impulso a la inversión pública y a las infraestructuras-- y de otras "estructurales", que no precisó.
Tras la bonificación de 1.500 euros para los nuevos contratos a trabajadores en paro con hijos a cargo, el Gobierno se ha comprometido a estudiar rebajas de cuotas para sectores estratégicos, como los vinculados a energías renovables o la investigación. Según fuentes socialistas, medidas de este tipo también se incorporarán al nuevo plan de medidas de la próxima semana. Ocaña descartó aumentar la cobertura del seguro de desempleo. "Queremos movilizar a los parados y crear empleo", dijo.
