Cumpliendo con uno de los objetivos del Pacto de Zurbano para reactivar la economía, el Consejo de Ministros modificó ayer por decreto el reglamento del impuesto de sociedades. El objetivo es exonerar, sobre todo, a las pequeñas y medianas empresas (pymes) de la obligación de documentar las operaciones vinculadas dentro de España cuando el total de las efectuadas con la misma persona o entidad no supere los 250.000 euros.

Las operaciones vinculadas son aquellas que se llevan a cabo entre sociedades que pertenecen a un mismo grupo o entre las que existan relaciones de dependencia entre sus accionistas o administradores, aunque en casos como los autónomos incluyen cosas tan básicas como el pago del alquiler.

Mientras que el Pacto de Zurbano establecía el límite de 100.000 euros de este tipo de operaciones por debajo del cual no necesitaban cumplir con las obligaciones de presentar la documentación, el Gobierno ha elevado el listón hasta el cuarto de millón. Se mantiene en todo caso que las empresas beneficiadas serán las que hayan tenido durante el ejercicio fiscal un volumen de negocio no superior a los ocho millones de euros.

Según los estudios, las pymes ahorrarán unos 3.600 millones de euros al año.