Los expertos del Seguro sostienen que hay plazo "suficiente" en 15 años para realizar las reformas necesarias que garanticen el equilibrio económico-financiero del sistema de pensiones a largo plazo y eviten que entre en crisis a partir del 2020. Por tanto "no hay que alarmar a la opinión pública porque vivimos en el mejor momento de la historia de la Seguridad Social", afirmó ayer el ministro de Trabajo, Jesús Caldera.

El Informe de estrategia nacional en relación al futuro del sistema de pensiones que España enviará el 31 de julio a la Comisión Europea ofrece una visión diferente de la situación del Seguro respecto al anterior texto del 2002 y alarga la situación de estabilidad financiera del sistema dos años, hasta el 2020.

En el documento que ayer presentó Caldera los expertos de Trabajo utilizan la nueva proyección demográfica basada en el Censo del 2001, que prevé casi 49 millones de españoles en el 2050. No ocultan el problema del envejecimiento de la población y el problema para la viabilidad del sistema derivado del aumento de la esperanza de vida. Dentro de 45 años, el 33,5% de la población será mayor de 65 años y se jubilarán 138 personas por cada 100 jóvenes que entren en edad de trabajar.

Pero los expertos también tienen en cuenta el crecimiento de la tasa de ocupación (62% en el 2004) gracias a la paulatina incorporación al mercado de trabajo de mujeres e inmigrantes, el incremento de las bases de cotización, el aumento exponencial del número de cotizantes al Seguro (en julio se batirán todos los récords) y el crecimiento del Fondo de Reserva, entre otros factores.

Con estas premisas, los superávits de la Seguridad Social están asegurados hasta el 2015, año en que tendrá un déficit de 625,46 millones de euros. Los expertos aconsejan emplear lo guardado hasta el momento en el Fondo de Reserva, que ahora suma 26.650 millones de euros, el 3,18% del PIB, y que equivale a seis mensualidades de la nómina de pensiones.