Los transportistas españoles llevarán a cabo a partir de hoy un paro indefinido, tras fracasar ayer los últimos intentos del Gobierno para evitarlo.

La protesta consistirá en la mera inactividad, sin que esté prevista la realización de marchas lentas, colapsos ni otro tipo de acción directa. Las intensas negociaciones mantenidas por las partes a lo largo del día no dieron el fruto esperado. Las organizaciones convocantes no llegaron a un acuerdo con Trabajo, Hacienda e Interior.

Tras alcanzar el pasado sábado un acuerdo con el Ministerio de Fomento, los representantes de los transportistas buscaban ayer la firma de un pacto global sobre las compensaciones por el alza del gasóleo con los ministerios afectados.

ESCASOS AVANCES La ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, presidió como intermediaria una maratoniana reunión a la que también asistieron el secretario general de Hacienda, Javier Burgos; el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado; el director general de Tráfico, Pere Navarro, y el subsecretario de Seguridad Vial, Federico Fernández.

A última hora de ayer, se consideraba imposible desconvocar la huelga ante los escasos avances en las negociaciones. La supresión del llamado céntimo sanitario, el adelanto en la edad de jubilación y el tratamiento especial en el nuevo carnet por puntos seguían impidiendo el acuerdo. Tampoco se pudo celebrar ningún encuentro con los cargadores para que asuman una subida del 14,3% en las tarifas por el gasóleo.

Antes de entrar en la reunión, el presidente de la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), Marcos Montero, aseguró que la protesta "es un paro ordenado que no tiene que producir violencia", a la vez que aseguró que sólo se caracterizará por la "inactividad del sector". "Otra cosa es que ante un paro indefinido, seamos suficientemente sensatos como para entender que la huelga se traslade a las próximas 48 o 72 horas, y que se desconvoque cuanto antes", añadió.

Montero subrayó, además, que, ante el paro y los "graves" problemas que puede tener para la sociedad, "tenemos que separar los conflictos que ha habido esta semana en algunas provincias españolas", porque, argumentó, la CETM "no es responsable de estas incidencias y las ha criticado fuertemente".