El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar hoy el anteproyecto de ley que regulará el Fondo de Reserva de la Seguridad Social y que permitirá que parte del mismo sea invertido en renta fija emitida por entidades privadas y en renta variable, pero siempre buscando valores seguros, rentables y con perfiles de riesgo distintos, según informaron fuentes gubernamentales.

La cuantía actual de la hucha de las pensiones supera los 40.334 millones de euros (4,1% del PIB) y a final de año rondará los 50.000 millones. La práctica totalidad del Fondo de Reserva está invertido en activos financieros públicos. La cartera de activos se reparte entre los emitidos por el Reino de España y entre deuda procedente de Alemania, Francia y Países Bajos.

España es el único país con un fondo de reserva de esta naturaleza que no invierte en renta variable. El resto de países sí lo hacen y los porcentajes de inversión en estos valores varían desde el 2,13% de Polonia hasta casi el 90% de Jersey, pasando por algo más del 56% en Francia.