El vicepresidente primero, Rodrigo Rato, afirmó ayer que el Gobierno sancionará a las empresas del sector de la distribución que encarezcan los alimentos perecederos (frutas, hortalizas, pescados y carnes) de manera injustificada.

En declaraciones a RNE, Rato explicó que las circunstancias que explican el alza de precios en los alimentos pueden ser justificadas --"como la climatología"-- o injustificadas, "caso de agentes económicos que introduzcan distorsiones en la cadena de la distribución". El Servicio de Defensa de la Competencia elabora un estudio cuyas conclusiones se conocerán en dos o tres meses.

GRANDES SUPERFICIES

Las grandes superficies --a las que no citó Rato-- se han convertido en blanco de acusaciones. "No creo que estas cosas se puedan resolver nunca en una película de malos y buenos y, mucho menos, en unas acusaciones a un determinado sector en contra del resto de la sociedad", afirmo el ministro.

El vicepresidente volvió a pedir a los gobiernos de las comunidades autónomas --con competencia en política de comercio-- mayor liberalización en el sector de la distribución. Rato les reclamó "políticas que hagan que los consumidores tengan mejores oportunidades de compra".

DEBATE "ESCANDALOSO"

La Confederación Española de Comercio (CEC), que agrupa a pequeños y medianos establecimientos del sector, consideró ayer un "escándalo" y una "falsa polémica" el debate sobre los alimentos frescos y la distribución. El secretario general de la CEC, Miguel Angel Fraile, opinó que el debate "se está magnificando" para distraer a la ciudadanía, "porque el Gobierno no hace los deberes" y apoya a los oligopolios.

Por su parte, el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, explicó que la próxima semana se analizará la aplicación inicial del doble etiquetado de precios en el tomate, la lechuga y la patata.