El diálogo social no avanza y el Gobierno --igual que ha hecho en la financiación autonómica-- está dispuesto a poner más dinero sobre la mesa para engrasar la negociación y poder cerrar un acuerdo antes de las vacaciones de agosto.

Ayer hubo una nueva reunión negociadora entre representantes del Gobierno, la patronal y los sindicatos, y el Ejecutivo entregó un nuevo documento en el que se habla de rebajar las cotizaciones a la Seguridad Social, pero se ha eliminado la propuesta de un recorte de 0,5 puntos que aparecía en un texto anterior, de finales de junio. Donde antes ponía esa cifra ahora hay un "pendiente" de próximas negociaciones. Todo hace pensar que la rebaja se acercará más a los 2 puntos que, según fuentes de la negociación, bastarían para concitar el apoyo de la patronal CEOE a un acuerdo de diálogo social, aunque la petición oficial fuera de cinco puntos.

Según el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, --que participa en las reuniones negociadoras-- el Gobierno ha emplazado a sindicatos y empresarios a que debatan sobre el alcance de la rebaja de cotizaciones sociales en reuniones bilaterales, que tendrán lugar a lo largo de esta semana. Por el momento, no ha habido ningún movimiento para mejorar la propuesta inicial del Gobierno de una prestación de 420 euros durante seis meses para los parados que hayan agotado su cobertura. Los sindicatos plantean alargar esta prestación a 12 meses.

Tanto en la rebaja de cuotas como en la prestación para parados, todas las partes dan por hecho que el Gobierno irá más allá del coste de 2.053 millones en que se evaluaron las principales propuestas de junio. La cuestión ahora es hasta dónde.

AVANCES Fuentes sindicales valoraron la reunión de ayer como un avance. Se dieron pasos en algunos de los temas menos conflictivos y se dejaron para próximos encuentros las cuestiones más espinosas.

La rebaja de 0,5 puntos que planteó el Gobierno en junio tenía un coste de 1.600 millones de euros. Los cinco puntos que reclama la CEOE tendrían un impacto de unos 16.000 millones en el sistema de la Seguridad Social, algo inasumible desde el punto de vista de Gobierno y sindicatos. "Fuentes cercanas a la negociación" citadas por la agencia Efe dijeron ayer que el Ejecutivo está dispuesto a rebajar 2 puntos las cotizaciones sociales y a alargar a 12 meses la prestación de 420 euros para los parados que estén sin cobertura. La primera propuesta tendría un coste de 6.400 millones; la segunda, de otros 906. En total, 7.306 millones de euros, equivalentes a 0,7 puntos del PIB, y más del triple de la oferta inicial.

Fuentes del Gobierno admiten que se está estudiando una rebaja superior a 0,5 puntos de las cotizaciones, pero se rehúsa confirmar que esta pueda llegar a 2 puntos. En este caso, la línea roja que ha establecido el Gobierno es que ninguna rebaja de cuotas afecte al sistema de pensiones contributivas. Cuando el Ejecutivo aceptó una rebaja de 0,5 puntos, es porque se cifraba en 1.600 millones de euros los excedentes acumulados en el subsistema de la Seguridad Social sobre contingencias profesionales (bajas laborales).

"SEPARACION DE FUENTES" Para llegar más allá de estos 0,5 puntos, el Gobierno debe jugar con la llamada "separación de fuentes" de la Seguridad Social. Es decir, si algunas de las prestaciones --diferentes de las pensiones contributivas-- que hoy se financiaron con cotizaciones sociales empiezan a pagarse con cargo a los impuestos que recauda el Estado, puede quedar un margen para ir más allá en la rebaja de las cuotas sociales.

En este sentido, la partida mayor es la correspondiente a los complementos para garantizar un nivel mínimo de prestación a las personas que no hayan cotizado lo suficiente a lo largo de su vida laboral. Fuentes del Ejecutivo confirmaron ayer que existen "algunos flecos", algunas partidas de gasto, que conceden al Gobierno un cierto margen de maniobra. No obstante, consideran que difícilmente se podría llegar a los 2 puntos con los que, según fuentes cercanas a la negociación, se conformaría la patronal CEOE.