El problema de la longevidad nos afecta a todos". Así de claro se mostró ayer el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio José Granado, que habló en Barcelona de los riesgos económicos que comporta el envejecimiento de la población. También afirmó que, si no se toman medidas, en 10 años el sistema de pensiones puede tener problemas.

"En los 90 había expertos que pronosticaban un negro futuro al sistema de pensiones español", afirmó Granado en las jornadas para profesionales financieros del salón Borsadiner, y añadió que hoy el sistema "goza de buena salud". "Mientras que las pensiones no contributivas se mantienen en menos de 500.000, las afiliaciones a la Seguridad Social crecen cada año", explicó. "Hay incluso más cotizantes que trabajadores".

El buen momento del sistema obedece a varias cuestiones: "separación de fuentes" (pensiones por un lado y sanidad por el otro) en el pago de impuestos, incremento del empleo, mejoras sociales como la reincorporación de la mujer al trabajo tras el embarazo y el "bonus" que supone que haya menos jubilaciones porque el número de personas nacidas entre 1932 y 1942 fue menor, por la situación política.

Sin embargo, Granado afirmó que "es evidente que tendremos muchísimos problemas en el futuro", ya que "la vertiente demográfica de nuestro problema es imparable". "Los inmigrantes retrasan el problema, pero no son la solución", explicó. Por eso apostó por equilibrar los sistemas en aportaciones y prestaciones, que las relaciones laborales sean más estables y que haya más contratos indefinidos. También propone acabar con las jubilaciones anticipadas y retrasar la edad de jubilación. "No es nada razonable que la gente pase de trabajar 40 horas a la semana a ninguna". "Con todo, no será suficiente", explicó Granado, quien dijo que la pensión del Estado no puede ser la única fuente de ingresos. "Activar el patrimonio", utilizar figuras como las hipotecas inversas, "abandonar el concepto de herencia" y, sobre todo, apostar por la pensión complementaria, son las recomendaciones de Granado.

COHESION "El sistema no quebrará, lo que quebrará es la cohesión social si no hay cambios" en los próximos 10 años, afirmó Granado. Opinó que España no está preparada para discusiones como la de intentar cambiar el sistema, ya que cualquier paso "sería mediatizado" y "politizado", porque son políticas "impopulares", aunque necesarias. "Yo tengo un plan de pensiones", concluyó Granado, quien dijo no entender a los que critican los fondos complementarios.