La huelga de empresas de camiones que comenzó hace una semana en Grecia ha provocado serios problemas de abastecimiento, sobre todo de gasolina, en todo el país. Esta mañana, el 90 por ciento de las gasolineras del país (de un total de 8.500 en Grecia y 1.270 en la zona capitalina de Atica) había agotado la gasolina, informaron fuentes del Ministerio griego de Transporte.

La Federación de Propietarios de Camiones permitió hoy a 200 vehículos cisternas de combustible, de un flota total de 1.700, abastecerse de gasolina desde las refinerías atenienses para repartirla a las estaciones griegas de servicio. El presidente de la Federación, Giorgos Tsamos, declaró hoy a los medios de comunicación que el sector exige al Gobierno un aumento del 13 por ciento en los sueldos y jubilaciones, y que rechazan la propuesta del Ministerio del 5 por ciento.

Los camioneros también se oponen a que el ministerio proporcione nuevas licencias de propiedad de camiones, que serían gratis, debido a que las actuales fueron compradas a altos precios en el pasado, declaró Tsamos. Themis Deliyanis, vicepresidente de los empresarios de gasolineras del puerto de Salónica, declaró al canal privado Alter que "los camioneros tienen razón en sus peticiones", pero les pidió "que la huelga no afecte a los dueños de las gasolineras o al consumidor".

La huelga de los camioneros también ha afectado al abastecimiento de alimentos perecederos, que se amontonan en las provincias y en los puertos sin poder ser repartidos. Gerasimos Agoudimos, armador griego, declaró hoy al canal estatal de televisión que la huelga afecta también al tráfico marino, ya que el transporte de camiones por barco constituye el 80 por ciento de los ingresos del sector.