La cumbre Asia-Europa (Asem) se convirtió en un llamamiento unánime para demandar una respuesta coordinada de la comunidad internacional ante la crisis, pero con muestras concretas de esta voluntad por parte de los gobiernos asiáticos. El sultán de Brunei, Haji Hassanal Bolkiah, coordinador de los países asiáticos en la cumbre, confirmó que un grupo de 13 países asiáticos creará un fondo de reserva en el continente 64.000 millones de euros destinado a ayudas financieras.