La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) no descarta autorizar la salida del Grupo Matutes del capital de la naviera Trasmediterránea. El presidente del organismo público, Ignacio Ruiz Jarabo, explicó que la venta del 12% en posesión del grupo de la familia del exministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, debe ser autorizada por el Estado y justificarse por "causas sobrevenidas y excepcionales", según indican las bases del concurso de privatización, que se cerró hace un año.
En cualquier caso, destacó que, de acuerdo con la información publicada en la prensa, "no estamos ante ninguna comisión ni ante ninguna plusvalía". En su opinión, el montante que se baraja, es "el precio pagado a la SEPI" por el Grupo Matutes "más el beneficio del ejercicio no distribuido" de Trasmediterránea. Ruiz Jarabo dijo que la "cuestión fundamental" es aclarar si se cumplen las condiciones fijadas en el concurso de privatización.
La firma fue adjudicada hace un año a un consorcio encabezado por la constructora Acciona, con el 55%, y del que forman parte la Caja de Ahorros del Mediterráneo, con el 15%; el Grupo Matutes (12%) y las navieras Aznar (10%) y Armas (8%). La SEPI ingresó 259 millones de euros (43.000 millones de pesetas) con la venta del 95,24% de Trasmediterránea. La participación del Grupo Matutes es de unos 31 millones de euros. La venta de su paquete se justifica por los pactos que tiene con la naviera Balearia.
