El Ministerio de Economía y Hacienda cifra en 4.000 millones el impacto del plan antifraude aprobado en el último Consejo de Ministros para el periodo 2010-2013. Según lo explicado el viernes, el nuevo plan solo iba a añadir 1.000 millones de recaudación adicional, al cabo de tres años, a los resultados que ya vienen dando las actuaciones de control de la Administración Tributaria (8.119 millones, en el 2009).

Ayer, fuentes de Hacienda aclararon que, además, el nuevo plan evitará una caída de 3.000 millones en los resultados que, de otro modo, se hubieran producido por la menor actividad económica y, en particular, de la construcción, objeto prioritario de la inspección durante el boom. Según Hacienda, la necesidad de un nuevo plan nace de la realidad de la crisis, donde el empleo sumergido ha desplazado, como principal conducta defraudatoria, a la ocultación de beneficios, en general, y en la construcción, en particular.

De ahí que fortalecer la cooperación entre la Agencia Tributaria y las inspecciones de Trabajo y de la Seguridad Social sea objetivo clave. Las inspecciones fiscal, laboral y social definirán los sectores de riesgo. "Se trata de realizar comprobaciones de actividades económicas no declaradas, que emplean masivamente a empleados no dados de alta o que ocultan parte de las retribuciones de los trabajadores a la Tesorería General de la Seguridad Social, y que ocultan a la AEAT la mayor parte de sus ventas o emiten facturas falsas", explica el plan.

Se prevén actuaciones conjuntas sobre subcontratistas, consumo de gasóleo bonificado, falsos autónomos, horas extraordinarias no retribuidas, deducciones indebidas por incapacidad temporal, bajas ligadas a vacaciones, uso indebido de la figura del becario y centros sanitarios privados, entre otros.

Un programa de la Agencia Tributaria identifica a grandes contribuyentes que dicen no residir en España aunque es fácil demostrar lo contrario. Bajo este programa se ha seleccionado a un centenar de contribuyentes, uno de los cuales ha regularizado ya 24 millones.