La toma de beneficios se generalizó ayer en todas las plazas bursátiles. Por eso predominaron los paneles con números rojos después de unos días de acumular ganancias. Pero la bolsa española se independizó. Así, el principal indicador bursátil español, el Ibex 35, que también vivió momentos de retroceso a lo largo de la jornada, acabó finalmente el día en tono positivo, con una ganancia del 0,18%, hasta los 9.744,70 puntos. De esta forma registró la sexta sesión consecutiva de beneficios, con la ayuda de los grandes valores, que no hace más que consolidar una tendencia alcista.

De entre los títulos con una mayor capitalización destacaron el BBVA, que ascendió el 1,81%; Iberdrola, con el 0,97%; Telefónica, con el 0,58% y el Banco Santander, que avanzó el 0,35%. Al margen de esta corriente alcista, Repsol bajó el 0,19%. La petrolera española se vio afectada por la espera de los resultados de las reuniones de sus principales ejecutivos con responsables en Argentina y Ecuador.

Sacyr, precisamente la primera accionista de Repsol, encabezó las ganancias del Ibex, con una subida del 3,62%, seguida del Banco Popular, que avanzó el 2,14% y del BBVA. Por su parte, Indra, cuyo beneficio aumentó el 30% hasta septiembre, ganó el 1,2% y Bolsas y Mercados Españoles, el 1,14%.

Gamesa fue una de las protagonistas en el capítulo de las pérdidas, con una bajada de su cotización del 6,09%, seguida de Acciona, que cayó el 3,92%.

También se dejaron valor en el camino Acerinox, que cedió el 3,91%; OHL, el 3,36%; Grífols, el 3,13% y Mapfre, que experimentó un retroceso del 3,08%.

En el mercado continuo destacó la caída de Arcelor Mittal, el 16,26%, después de anunciar al mercado que su beneficio había crecido el 34% y que reduciría su producción un tercio. Por su parte, la compañía de energías renovables Fersa comandó las ganancias en el mercado continuo, al finalizar la sesión con una subida del 11,3%.