El escándalo Parmalat ha salpicado ahora al banco italiano Capitalia (antes Banca de Roma). El dueño del grupo alimentario Parmalat, Calisto Tanzi, ha acusado al presidente de Capitalia, Cesare Geronzi, de haberle presionado para comprar dos empresas a precios excesivos, según publicó ayer El Corriere de la Sera .

El diario informa de que el 30 de diciembre, durante un interrogatorio, Tanzi declaró que Geronzi le presionó para comprar Eurolat (propiedad del grupo alimentario Cirio, ahora también en quiebra) y la empresa de aguas minerales y bebidas, Ciapazzi, a un precio mucho más alto de lo que dictaba el mercado. El objetivo de Geronzi --según declaró Tanzi a los magistrados-- era ayudar al grupo Cirio, de Sergio Cragnotti, con el que había sumado una enorme deuda.

CONFIRMACION DE TONNA Según Tanzi, Parmalat no podía evitar este tipo de presiones, ya que había acumulado una deuda de entre 430 y 470 millones de euros con Capitalia (entre 71.546 y 78.200 millones de pesetas). Las declaraciones del propietario de Parmalat han sido confirmadas por el exdirector financiero del grupo, también detenido, Fausto Tonna.

Capitalia emitió ayer un comunicado desmintiendo esta información y calificando de "interesadas" las acusaciones de Tanzi. Capitalia asegura que podrá suministrar documentos que muestran que la compra de Eurolat, que se hizo en 1999 por 330 millones de euros (casi 55.000 millones de pesetas), fue totalmente correcta y que la transacción fue positiva para Parmalat, por lo que no contribuyó a la actual bancarrota.

Al menos por el momento, Geronzi no ha sido incluido en el registro de personas investigadas por el caso Parmalat . Sin embargo, el presidente de Capitalia estaba en la mira de los jueces por la bancarrota de Cirio.