El grupo textil gallego Inditex, propietario de las tiendas Zara, incrementó su beneficio atribuible en el primer semestre fiscal, que va del 1 de febrero al 31 de julio, en un 29%, hasta situarse en 246,2 millones de euros, según comunicó ayer. Este resultado es más de lo previsto por los analistas que, de media, habían pronosticado un beneficio de entre 224 y 227 millones de euros. Por ello, las acciones de Inditex reaccionaron ayer con una fuerte subida del 5,6% en la bolsa.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) del grupo textil español creció un 21%, hasta 517,3 millones de euros, con un alza del 20% en las ventas, hasta alcanzar la cifra de 2.819,7 millones de euros. El margen bruto llegó al 56,2% gracias al incremento de precios de las prendas y al mejor control del inventario.
El grupo que preside Amancio Ortega quiere doblar su tamaño en los próximos cinco años. En el segundo semestre se acelerará la apertura de tiendas para cerrar el ejercicio con entre 400 y 450 nuevas tiendas, frente a 322 aperturas netas en el 2004. En el primer semestre del 2005, Inditex ha abierto 166 puntos de venta, de modo que la compañía ya tiene una red de 2.404 tiendas en un total de 57 países.
