El grupo de productos ópticos presentó ayer las cuentas referentes al primer semestre del año en las que totaliza unas pérdidas de 6,5 millones de euros y un decrecimiento de la facturación del 15%, hasta situarse en 65,5 millones.

En un comunicado remitido a los medios, la compañía con justificó el desplome de las ventas por el descenso de consumo en España y en los mercados europeos, así como por la retirada de Alemania. Aunque no cita las pérdidas acumuladas hasta junio, la firma sí que justifica el proceso de reestructuración a que está sometida en los últimos meses y que ha permitido incrementar levemente el margen y reducir los gastos en operaciones y personal.