El presidente del Banco Sabadell Atlántico sitúa en paralelo solvencia de la banca y capacidad para financiar la economía española. Y explica que hay dos tipos de entidades, las que dan crédito y las que se fusionan.

--¿No le parece que hay mucha urgencia por la reestructuración del sistema financiero?--Creo que el mecanismo establecido en el caso español ya está. Es el FROB. Y si no ha sido utilizado por nadie es porque no ha hecho falta o porque no han sido capaces de ponerse de acuerdo del todo los interesados. Hay que tener paciencia.

--Eso no es lo que dice la patronal bancaria...--Este proceso tiene sus dificultades: hay comunidades autónomas, gestores de las entidades, intereses locales diferentes dentro de las propias entidades, el rechazo a que se produzcan fusiones entre entidades financieras de comunidades diferentes...

--Un tercio de cajas no encajan en ningún proyecto...--Ellos consideran que no tienen por qué entrar en este mecanismo. Es un problema de viabilidad individual. Si pueden tirar adelante solas --ellas lo sabrán-- no se les debe pedir que se fusionen.

--¿Son comparables las ayudas del 2% al 2,5% de los activos en riesgo del FROB con las de los bancos europeos?--No. Los otros han recibido más ayudas. Pero la AEB considera que si hay que tomar capital, las entidades tendrán que hacérselo mirar.

--¿Qué provecho sacarán los bancos de las fusiones?--Es posible que en algún caso vendan una red de oficinas que tenga interés, pero solo si hay una masa crítica suficiente y la totalidad de las oficinas están en un mercado concreto.

--Siempre se da un periodo transitorio que permitirá que quien esté más aposentado saque más rendimiento de la situación.--Sí. He estado recientemente en una comida con empresarios que preguntaban cuánto tiempo durará esto de las fusiones porque se encuentran con dos tipos de bancos: ´los que nos hacen caso y los que se fusionan´.

--¿Hay poca demanda de crédito o pocas ganas de concederlo?--Notamos una falta de demanda de crédito. Luego hay una demanda insatisfecha de aquellos que tienen negocios que no cumplen con los estándares de viabilidad actuales.

--Pero hacen más hipotecas. ¿Qué ha cambiado?--Se vuelven a vender pisos a precios adecuados y, en consecuencia, se hacen hipotecas.

--¿Cuánto han bajado los precios desde el inicio de la crisis?--Vemos que pisos con una bajada del 25% respecto al 2007 se venden, y con cierta facilidad.

--¿Puede cambiar la tendencia de precios y comenzar a subir?--No lo creo. Los precios no subirán hasta que la oferta disponible haya disminuido.

--Volviendo al crédito, ¿cómo debe interpretarse lo que quiere hacer el Gobierno con el ICO para financiar a las empresas?--Debe entenderse como una ayuda temporal. Su efecto será limitado si no se puede canalizar a través de los canales habituales.

--Que el Gobierno aplique este mecanismo quiere decir que entiende que el sistema bancario no atiende la demanda.--Quizá hay un 20% del sistema bancario que no está atendiendo su demanda de crédito, y eso es un problema. Pero el otro 80% la atiende. Los primeros son una parte pequeña del sistema, pero suficiente para que se note.

--Las cajas dicen que la morosidad viene de la industria, con más presencia de los bancos.--La mayor parte de la morosidad es de promotores inmobiliarios, y afecta a cajas y bancos. Pero la morosidad de promotores está ya descontada. El problema deriva de la promoción inmobiliaria.

--¿En cuanto a la subida del IVA, usted la aplicaría?--Creo que el problema más importante de España es el de no emitir mensajes exteriores clarísimos de que se bajará el déficit público y se volverá a la estabilidad presupuestaria. Primero hay que bajar el gasto, pero como seguro que no será suficiente, se tendrán que tocar los impuestos. Se puede subir el IVA, pero también se puede reconsiderar todo el gasto social, que no es sostenible.

--Esa es la línea de la reforma de las pensiones.--Tenemos un déficit de credibilidad internacional muy grande. Si recuperamos credibilidad, recuperamos crédito y los bancos, las cajas y las empresas emitiríamos empréstitos al exterior y dejar dinero a los empresarios y a los consumidores españoles. Si credibilidad exterior, nadie nos dejará dinero.

--¿Demasiadas contradicciones al explicar las decisiones?--Habría que explicar de una manera clara cuáles son las dificultades económicas del país y cómo hacerlas frente.