Los tazos --pequeños discos de juego infantil-- son propiedad de una firma con sede en Sabadell (Barcelona), el Grupo Promer Mon-Graphic, y no de la multinacional Pepsico. Así lo afirma el tribunal de primera instancia de la Comunidad Europea, para quien los discos que regala la compañía de EEUU en bolsas de aperitivos son un plagio del diseño de Promer, informó ayer Efe.
La sentencia pone fin a un largo litigio legal. El tribunal, que anula una decisión de la Oficina Europea de Armonización del Mercado Interior (OAMI), que había dado la razón a Pepsico, entiende que la multinacional no diferenció suficientemente su producto, pog en inglés.
Promer perdió en el 2003 el concurso convocado por Pepsico para adjudicar la contratación de artículos promocionales para productos de consumo del grupo como aperitivos. Poco después, la multinacional patentó a su nombre el diseño de los tazos. Promer había patentado también su creación 15 días antes.
