El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón citó ayer a declarar al expresidente del BBVA el próximo lunes como imputado por los delitos de cohecho y descubrimiento y revelación de secretos. El que durante casi 20 años fue máximo responsable del banco se suma así a la larga lista de investigados en el caso Tándem, cuyo principal imputado es el excomisario José Manuel Villarejo.

El magistrado también acordó otras citaciones. El mismo día 18 ha sido llamado, aunque como testigo, Javier Ayuso, que fue director de comunicación del BBVA y posteriormente jefe de prensa de la Casa Real. Al día siguiente comparecerán, en su caso como imputados, Juan Asúa, asesor principal del actual presidente de la entidad, Carlos Torres, y Eduardo Arbizu, que hasta julio, cuando fue cesado al conocerse la imputación del BBVA, era responsable de regulación y control interno del banco. La declaración como imputada de la entidad como persona jurídica, fijada inicialmente para julio, está prevista para el 20.

Estas citaciones se han fijado un día después de saberse que Anticorrupción pedía una nueva tanda de imputaciones, por los pagos que la entidad hizo durante años a Cenyt, la empresa de seguridad del entramado de Villarejo, para «el desarrollo de múltiples servicios de inteligencia y/o de investigación de naturaleza patrimonial y carácter ilícito».

Entre los que declararon entonces estaba el exjefe de Seguridad de la entidad Julio Corrochano, al que en los audios intervenidos en las oficinas y domicilio de Villarejo y su socio Rafael Redondo, se le oía decir que informaba al «presi» cada 10 o 15 días.

González dejó la presidencia a finales del año pasado, tras conocerse la relación del banco con el expolicía. Abandonó temporalmente la de honor en marzo, tras ser imputada la entidad. En un comunicado, el exbanquero manifestó este miércoles «su plena disposición a colaborar con la Justicia» y se remitió a otra nota de marzo, en la que defendió que la entidad actuó bajo su mandato «dentro de la más estricta legalidad», algo que habría que «deslindar (de) posibles actuaciones individuales de carácter irregular, si las hubiera».