EL PRIMER MINISTRO japonés logró ayer la promulgación de la ley de privatización del servicio de correos, columna vertebral de su plan de reformas y clave para doblegar la desmesurada deuda pública del país. El espaldarazo se lo concedió el Senado al aprobar la reforma postal, después de que la Cámara baja del Parlamento japonés ya hubiera dado su visto bueno a la privatización de correos el martes pasado. EFE