Tras la tormenta, llegó la calma. La junta de accionistas de El Corte Inglés ratificó ayer el nombramiento de Marta Álvarez Guil como presidenta del grupo, después de su elección unánime por el consejo de administración el pasado 10 de julio. La presidenta marcó en su discurso cuáles deben ser los ejes del nuevo El Corte IngLés: marcas propias, transformación digital y nuevos negocios.

«Tenemos proyecto y tenemos futuro. Somos una compañía que está cerca de la sociedad y que entiende las necesidades de las personas», indicó Álvarez en la junta de accionistas, que aprobó todas las propuestas del consejo de administración: la fusión por absorción de El Corte Inglés y Bricor, las cuentas anuales y el informe no financiero, así como la renovación de Manuel Pizarro como consejero.

La presidenta recalcó que el grupo es una «una compañía sistémica para la economía española, un generador de riqueza y empleo, un impulsor de ideas capaz de crear conceptos comerciales novedosos, de marcar tendencia y de situarnos a la vanguardia». Álvarez, que junto a su hermana Cristina Álvarez controla un 60% del capital del grupo, remarcó también el «trabajo en equipo» de sus «más de 90.000 empleados».

FUTURO / «Tenemos ante nosotros un futuro prometedor porque nuestros equipos tienen creatividad e imaginación para desarrollar nuevos conceptos de negocio, para poner en marcha productos y servicios diferenciales, para impulsar ideas innovadoras que se anticipen a las necesidades del mercado», destacó.

Así, detalló las tres actuaciones que han puesto en marcha: adecuar los grandes almacenes a las demandas del consumo potenciando las marcas propias (lanzará Alik y Another Love en el 2020), el avance en la transformación digital («no hay dos clientes, uno digital y el otro físico. Hay un solo cliente, al que debemos servir por todos los medios y por el canal que decida», dijo, y anunció que lanzarán su app en breve), y el desarrollo de nuevos negocios y servicios, solos o en compañía de líderes de cada sector nacionales o internacionales.

«Estamos dando una nueva dimensión a nuestras tiendas como lugares de experiencias donde el cliente no solo puede adquirir productos y servicios, sino también disfrutar, entretenerse y experimentar nuevas vivencias y sensaciones», concluyó.

La asamblea de socios, en la que estuvo representado el 92,7% del capital, dio luz verde a la fusión por absorción de Bricor por parte de El Corte Inglés. Asimismo, se aprobaron las cuentas anuales, el informe de gestión y la propuesta de aplicación de resultados, así como la gestión del consejo de administración correspondientes al ejercicio 2018.

El resto de puntos incluidos en el orden del día fueron también aprobados por mayoría: la ratificación de las transmisiones de las acciones en cartera, la autorización para la adquisición de acciones propias, la aprobación de remuneración del consejo de administración, y la delegación de facultades. Igualmente, se ha ratificado la propuesta del consejo de administración para repartir un dividendo de 75 millones de euros, frente a los 65 millones del año pasado.