El secretario general de UGT, Cándido Méndez, asumirá el próximo 28 de mayo la presidencia de la Confederación Europea de Sindicatos (CES) con el objetivo de transformar la organización en un verdadero sindicato europeo. Méndez tratará de culminar esta metamorfosis para que la CES deje de ser la mera representación de 78 organizaciones y 11 federaciones de 34 países.

El congreso de la CES, que se celebrará del 26 al 28 de mayo en Praga (República Checa), sentará por primera vez en el sillón de presidente a un español. Méndez representará a 60 millones de trabajadores, con el secretario general de la CES, en la Comisión Europea, en las reuniones tripartitas con la patronal europea UNICE y con el Ejecutivo comunitario, y en las cumbres de empleo de primavera.

CABEZA VISIBLE

El líder de UGT, que sustituirá al líder austriaco de la OGB, Fritz Verzetnitsch, será la cabeza visible de la CES ante la presidencia semestral de la UE y en las reuniones comunitarias que afecten al diálogo social. El secretario general de la CES desde 1991, Emilio Gabaglio, dejará paso al británico John Monks.

El reto del congreso es que los nuevos líderes conviertan la confederación en un "sindicato europeo que pueda opinar sobre cómo se construye la Unión Europea", asegura Manuel Bonmatí, responsable confederal de Relaciones Internacionales de UGT. Los sindicatos de los países del sur de Europa quieren que la CES adquiera unas competencias supranacionales para negociar ante la Comisión Europea y los empresarios.

APUESTA FEDERALISTA

Los 600 delegados que acudirán a Praga debatirán sobre la necesidad de que "haya más o menos Europa". Méndez apostará por el federalismo y por una UE que no se quede en la moneda única o en un espacio de libre circulación de mercancías.