Pese a ser el lugar donde se originó la pandemia, en China sus efectos hace tiempo que dejaron de ser tan graves como en Europa o en América. En el Gigante Asiático, los eventos multitudinarios ya están permitidos y pese a que todavía se registran casos, desde el país se asegura que la pandemia está controlada. Es por eso que no sorprende que su mercado automovilístico, el más grande del mundo por volumen, crezca desde que se reactivó tras el paso del virus.
Según estimaciones de la Asociación de Fabricantes de Automóviles de China (CAAM), se matricularon un total de 2,54 millones de vehículos en octubre, un 11% más respecto al mismo mes del año pasado. Desde que en abril registrarán una subida del 4,4% tras el paso de la primera ola del Covid-19, el mercado chino no ha abandonado la senda del crecimiento. Según la CAAM, las ventas de turismos y todoterrenos crecieron un 7,3%, mientras que las de vehículos comerciales e industriales hicieron lo propio un 28%. Los datos exactos serán confirmados próximamente.
IMPACTO CONTRA EL CORONAVIRUS
Tras dos años cayendo, el coronavirus irrumpió en China parando su actividad y lastrando un año que podría haber sido muy positivo. Durante los primeros 10 meses de 2020, se vendieron 19,66 millones de vehículos en el Gigante Asiático, un 4,8% menos respecto al año pasado a partir de una caída del 10% en las matriculaciones de turismos y todoterrenos y un incremento del 21% en las de vehículos industriales y comerciales.
La CAAM esperá presentar las cifras extactas del mes de octubre y, por tanto, del acumulado del año, así como las ventas de vehículos electrificados y de propulsión alternativa la próxima semana.
