Más fácil, rápido, seguro y, sobre todo, menos problemático. Esa es la promesa con la que Microsoft anunció ayer, en la feria tecnológica SIMO de Madrid, el lanzamiento de su nuevo modelo, el Windows 7, que viene a sustituir al muy criticado Vista. "Es el mejor sistema operativo de los que han salido al mercado", proclamó ayer María Garaña, presidente de la compañía en España.

El gran reto, aunque no reconocido, del gigante es superar la decepción que provocó su anterior modelo. "Vista ha sido hasta ahora el sistema operativo más seguro. Pero cuando salió solo era compatible con 15.000 dispositivos: si la impresora no iba, a la gente le daba igual si era por Microsoft o por el fabricante", admitió Garaña.

Para solucionar este problema, Microsoft ha trabajado con sus socios para que el nuevo modelo sea compatible con 80.000 dispositivos. En España, la empresa está trabajando con las 46 compañías de software locales que utilizan Windows para asegurarse el correcto funcionamiento de sus aplicaciones.

El otro gran objetivo de Microsoft es que su nuevo sistema permita hacer las tareas diarias de forma más sencilla y veloz. "El café por la mañana mientras enciendes el ordenador se ha acabado: el tiempo de arranque no es de más de 20 segundos", se congratuló Garaña. Además, Windows 7 permite tener abiertas hasta 50 ventanas a la vez sin que afecte al rendimiento.

La tercera baza del nuevo sistema es que será más seguro. Permitirá, por ejemplo, encriptar no solo la información del ordenador, sino también la de los dispositivos portátiles USB. También va a facilitar que los usuarios puedan acceder desde su hogar de forma segura a toda la red corporativa de su empresa.

Microsoft, que comenzará a comercializar el Windows 7 el 22 de octubre, espera vender 200 millones de licencias del producto en todo el mundo antes del 2011, de las que 50 millones se despacharán en Europa.