El Monte dei Paschi di Siena (Mps), el banco más antiguo del mundo, ha decidido este jueves poner en marcha el último cartucho a su disposición para no quebrar o, lo que tal vez será más probable, para no tener que ser salvado con el aval del Estado. El consejo de administración de la entidad ha lanzado una ampliación de capital de al menos 5.000 millones de eros que, de no encontrar tendría que inyectarlos alguna sociedad o empresa paraestatal, con el aval del Gobierno, que tiene las manos atadas por las nuevas normas de la UE y no puede intervenir directamente como se hizo en España 10 años atrás.

El consejo de administración del banco de Siena ha puesto en marcha la ampliación sin contar todavía con el visto bueno de la CONSOB -órgano de vigilancia de la bolsa de valores—aunque habría recibido su visto bueno oficioso, según informa la edición digital del diario económico Il Sole-24 Ore.

La ampliación de capitales constituye la última tentativa antes de la intervención del Estado, que ya fue garantizada por el nuevo Ejecutivo presidido por Paolo Gentiloni, como también lo había sido por el anterior gabinete de Matteo Renzi.

La ampliación deberá ser realizada antes del 31 de este mes, según el plazo fijado por el BCE, que rechazó ampliarlo hasta el 20 de enero, tal como había solicitado la entidad toscana.El 35% de la misma está destinada al público general de inversores y un 30% a los actuales accionistas del banco. El precio máximo de salida es de 24,9 euros por acción y de un mínimo de un euro.

Antes de la dimisión de Renzi, en la noche del domingo 4 de este mes, ya se había llegado a un preacuerdo para el rescate, en el que habría intervenido el fondo soberano de Catar, pero con el caída dle gobierno los inversores dieron marcha atrás. El consejo de administración del Mps ha recuperado ahora la iniciativa bajo la forma de una ampliación de capital. Los pequeños inversores del Mps -“el banco es de todos”, decían los habitantes de la ciudad—poseen unos 13.000 millones de obligaciones que si la ampliación de capital o el rescate estatal indirecto no funcionan, tampoco recuperarán, porque deberá recurrirse a una salvación bancaria interna y transformar dichas obligaciones en acciones de un instituto sin valor.

Monte dei Paschi fue, el pasado mes de julio, el único banco que quedó por debajo de los valores mínimos exigidos a 51 entidades financieras europeas evaluadas por la Autoridad Bancaria Europea. Comenzó entonces un proceso de saneamiento de sus cuentas que comprendía la citada recapitalización y la venta de 27.700 millones en créditos morosos.