El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, dijo ayer que la cuota de mercado de las exportaciones no ha bajado como consecuencia del incremento del diferencial de precios con la UE que, al final del 2002, se situó en 1,8 puntos. El diferencial respecto a la zona euro se situó en 1,7 puntos. La tesis de Montoro contradice la preocupación del Banco de España por la pérdida de competitividad de las exportaciones, y su impacto sobre el crecimiento y el empleo.

En su último Boletín Económico, el Banco de España señaló que "el mantenimiento de crecimientos de precios y costes más elevados que en otros países de la Unión Monetaria, y la apreciación del tipo de cambio del euro han debido restar impulso a las ventas al exterior" de productos españoles. Además, destacó que "el abaratamiento de los precios relativos" del exterior ha contribuido al mayor incremento de las importaciones. Para el Banco de España, "el reto" al que se enfrenta la economía española en el 2003 es, precisamente, tratar de reducir el diferencial de precios con la zona euro.

En el Ministerio de Ciencia y Tecnología se afirma que las exportaciones de la industria han perdido el 4% de competitividad desde 1995 frente a la zona euro por la evolución de los precios industriales.

En el pleno del Senado, Montoro admitió ayer que la evolución del índice de precios de consumo (IPC) de los últimos años "es inquietante y preocupante", pero atribuyó parte del diferencial de precios con la UE a la mayor tasa de crecimiento de la economía española. Además, citó otros factores que han afectado a la inflación, como el shock petrolífero del 2000 y el 2001, la depreciación del euro y las crisis alimentarias, a lo que --según dijo--se unió el año pasado la subida de los impuestos indirectos y el redondeo al alza del euro. Montoro insistió en que los precios se moderarán en el 2003, de modo que el IPC interanual bajará al 3% en la primavera.

DEFICIT PUBLICO

El ministro confirmó ayer que el cierre definitivo de las cuentas públicas de la administración central del Estado (Estado y Seguridad Social) en el 2002 arrojó un superávit del 0,2% del PIB.

El Gobierno está a la espera de recibir la liquidación definitiva de gran parte de las autonomías, algo que se debe producir en los próximos días, ya que debe presentar en Bruselas el cierre de la ejecución presupuestaria antes del 28 de febrero. El Gobierno estima que las administraciones territoriales arrojarán un déficit del 0,4% del PIB, con lo que el déficit conjunto sería del 0,2%.